jueves, 21 de enero de 2016

La pelea inter-mafiosa

Cuando unas bandas del crimen organizado, inician guerras entre ellas, es entre otras cosas para definir quién de ellas administrará el territorio, donde se realizan los negocios ilegales. Entonces se inicia una guerra entre ellas, encarnizada, donde cada banda pone lo mejor de sus armas y estrategias, para vencer a las rivales, en ese proceso se producen alianzas, traiciones, deserciones. Pero lo que queda claro,es que cualquiera que gane, seguirá con los negocios ilícitos. Porque esa es su esencia, su forma de vida.

                           

Entonces en el Perú se van a dar las elecciones generales del 2016, donde hay cerca de  20 partidos y movimientos políticos que se disputarán el poder por el periodo 2016-2021. La mayoría de estos partidos políticos, solo fueron creados para las elecciones, anteriormente, no existían y los que habían, no tenían vida partidaria, ni orgánica; como tampoco han habido debates políticos sobre los problemas del pueblo, como son la contaminación, la delincuencia y la economía. No se ha escuchado ha alguno de ellos, molestarse por expresar un bagaje ideológico. Todos son partidos y movimientos, que una ves que lleguen al poder, no harán transformaciones, sino que convivirán con el actual sistema. Es decir es una competencia de oportunistas que busca hacerse del "negocio", que va dejar el gobierno saliente de Heredia-Humala, que consiste en administrar el sistema y cobrar regalías de las compañías a las cuales el territorio peruano, se ha concesionado.

Si en 1990, Fujimori dijo que no haría shock-económico y a los 20 días hizo un shock, si dijo que no iba a vender las empresas públicas y lo primero que hizo fue venderlas, o mejor dicho rematarlas. Si Toledo prometió eliminar las services y para ésto hizo su Marcha de los Cuatro Suyos, luego en su gobierno se dedicó a continuar el plan fujimorista. Si Humala hizo su levantamiento en Locumba, contra la corrupción de Fujimori, prometió una Gran Transformación, llegado al gobierno se dedicó a complacer los caprichos de su mujer y proteger a sus colegas de armas de los juicios por violación de derechos humanos. Entonces estamos ante una regla que consiste en: Prometer, mentir, vender una ilusión, para obtener el voto y la aprobación del pueblo. una ves en el poder, traicionar las promesas, que conscientemente son mentiras y ejecutar un segundo proyecto que es dictado por los poderes fácticos ¿Y el pueblo? Que se vaya a la mierda el pueblo, total ya consiguió el poder.

Entonces estamos ante un espectáculo circense, donde el pueblo no es representado, en la práctica por ninguna gran fuerza política. Lo que hay es representantes de los lobbies: Japoneses, norteamericanos, del lavado de dinero, israelíes, de los militares, franceses; que son los que tienen el poder y el poder económico. Por lo que hay que perder el entusiasmo por ser fanático de payasos, como fue el caso de Ollanta Humala y su Gran Transformación, para las elecciones del 2011. Y hay que sobretodo entender, que cualquiera de los 20 que llegué al poder  este 2016, hará lo mismo que los anteriores: Hacer mas ricos a los ricos, en desmedro de las condiciones de vida del poblador del Perú, aumentando la contaminación y depredando los recursos naturales.

Porque, como están las cosas, el Perú, y otros países, hay una convivencia entre el poder político y el crimen organizado y los partidos políticos sin ideología-política se han vuelto entidades de lavado de dinero, coimas y corrupción, por lo que estás elecciones pueden ser vistas como una pelea inter-mafiosa, por administrar el territorio del Perú.

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