miércoles, 19 de julio de 2017

19 de julio de 1977

Hace 40 años un día como hoy se dio el paro nacional muy significativo, que paralizó totalmente el país, y éste se dio en el marco del comienzo de la políticas neo-liberales que implementaba el régimen militar de Francisco Morales Bermúdez (1975-1980), que significaba el desmantelamiento de las reformas sociales y estructurales del gobierno militar de Juan Velasco Alvarado, aquel paro unitario y total, se dio en el marco de las organizaciones populares, nacidas durante El Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas en su primera fase (1968-1975), que permitió la cohesión y el desarrollo de la clase obrera y el campesinado. El logro de éste paro, hizo que el gobierno militar de Francisco Morales Bermúdez (Condenado a cadena perpetua por un tribunal italiano) convocara a una asamblea constituyente que diera la constitución de 1979 y que obligara al gobierno militar a no integrarse al Plan Cóndor, debido a la fuerza de la izquierda y el pueblo organizado.



El día de hoy se dio un paro nacional convocado por la CGTP, probablemente queriendo emular aquel histórico paro-nacional de 1977, como era de esperar el paro transcurrió sin pena ni gloria, claro que hubo movilizaciones, empequeñecidas a pesar de que hubo una inusual movilización policial.

La razón es que en el Perú ha desaparecido, la clase obrera, los sindicatos, el campesinado organizado, en su lugar a quedado un pueblo, lleno de trabajadores informales, ambulantes, pequeños-empresarios, los cuales están al margen de las organizaciones gremiales, que convocan un paro nacional como el que se pretendió que hubiera el día de hoy. Porque por ejemplo la CGTP, que pretende representar a la clase trabajadora tiene afiliados a trabajadores asalariados, como el SUTEP, como Construcción Civil y otras organizaciones, los cuales están abocados en una lucha de carácter pancista, es decir una lucha que solo toma en cuenta la cuestión salarial, porque sus afiliados son consumidores del sistema y pertenecen a la llamada "nueva clase media", por lo tanto la aristocracia obrera, que se constituye en el colchón que necesita la oligarquía peruana, para evitar una confrontación directa con la clase trabajadora.

En ésta lucha ,están al margen los trabajadores informales, que constituyen cerca del 80% de la Población Económicamente Activa, entonces están ausentes por ejemplo los trabajadores bancarios, que anteriormente participaban en los paros nacionales con la poderosa FEB (Federación de Empleados Bancarios). Motivo por el cual, el día de hoy todo en sistema bancario, estaba abierto. También estaban abiertos los mercados de abastos, el transporte y el comercio en general. Por lo tanto el paro no convocó a la mayoría del pueblo trabajador, el cual probablemente, ni siquiera se enteró que había un Paro Nacional.

La izquierda actual, es una derecha disimulada, pues entre otras cosas sus principales representantes están inmersos en suspicacias sobre corrupción y crimen organizado, por lo tanto no tienen la calidad moral para convocar a las masas, por eso el pueblo opta , por seguir a líderes-populares que  la derecha subliminalmente crea, como fue el caso del hoy reo Ollanta Humala Tasso y su consorte Nadine Heredia.

Por ello, la izquierda y la CGTP, tienen que entrar en un periodo de AUTO-CRÍTICA, si es que no quiere seguir dando vergüenza y seguir siendo el furgón de cola de la derecha y el pretexto de democracia, que necesita la derecha y la oligarquía peruana, para perennizarse en el poder.

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