Valores subyacentes en peligro.

La tradición de la cultura peruana, que no era la tradición criolla y oficial del Perú, rescataba algunos valores subyacentes, que eran una respuesta, al Perú occidentalizado, que nos pretendía dar la imagen, de que el Perú es Lima, que es criollo, que era semi-blanco. Entonces dicha cultura subyacente pregona, el indigenismo y el advenimiento del "Inkari", que podría ser el mesías Inka, que resucitará el imperio inkaico. Entonces siguiendo ésta tradición andina, es que, de manera consecuente, don Isaac Humala y Elena Tasso, bautizaron a sus hijos, con los nombres de Ollanta, Antauro, y a su hija con el de Ima Sumac, y los educaron para que sean presidentes, como si lo logró Ollanta, con el apoyo del pueblo peruano que puso su fe, en él.

       

Pero, una ves en el gobierno, resultó que, Ollanta Humala, no era hechura de su padre, sino era manufactura del sistema capitalista, con una estructura fabricada, en la institución que el ama, mas que su padre, que es "su ejército" y un acabado pulimentado que es su matrimonio con Nadine Heredia, la cual a sustituido a su madre, por lo que Ollanta no era el "Inkari" llamado a resucitar el Imperio Inka, sino un militar timorato, que recibió la orden de proteger a sus camaradas de armas en retirada, ante la ofensiva, por denuncias de violación de derechos humanos. Que si los inkas, en su imperio, basaron su economía en una floreciente agricultura de la papa, el maiz, la quinua, el olluco, el pallar, {que fueron creación de los laboratorios inkas}, una ganadería de auquenidos {llamas, alpacas,vicuñas,huanacos} y granjería de cuyes. Una eficiente  distribución de la riqueza, que se basaba, en el alimento y el vestido, producto de un sistema de trabajo colectivo distribuido según las capacidades y costumbres de cada pueblo del inkanato.

 Ollanta Humala, se convirtió en un mentiroso, que debe ser la vergüenza de su padre, que no ha seguido las tres leyes fundamentales de ese imperio: Ama sua, Ama kella, Ama Llulla, porque a los pueblos del Perú les prometió cosas como: ¡Agua si, oro no!. Pero inmediatamente investido de presidente, dio preferencia a la Minería, si esa minería extractiva y contaminante que trajeron los conquistadores españoles y por la cual, los campesinos inkas fueron levados, durante la conquista, para convertirlos en esclavos en los socavones mineros, para extraer el oro y la plata y por la cual la economía agrícola del imperio inka se destruyó, siendo sustituida por una economía de saqueo de los minerales, que hasta la fecha mantiene éste tipo de república y que cuyo crecimiento económico, se basa en la destrucción de los recursos agrícolas, para utilizarlos para la minería y dejar como saldo, contaminación para los pueblos y el engorde de los burócratas de Lima.

Por lo cual Ollanta ha pretendido ser el aniquilador del mito del "Inkari", porque él se hizo ver como un mesías, pero terminó siendo un estafador, una nueva versión de Felipillo de las transnacionales mineras y traductor in situ, de los poderes fácticos del imperio.

Por otro lado, hace tiempo que se escucha, el otro valor subyacente, respecto de que la mujer es menos corrupta que el hombre, por lo cual se creo un mesianismo femenino, donde se pretendía hacer ver a algunas mujeres ambiciosas del poder, la revancha de género y el dinero; como posibles dechados, que podrían sustituir a sus pares masculinos, porque supuestamente el asunto de la corrupción, es un asunto de género. Lo cual no es un asunto o fenómeno propiamente iniciado en el Perú, sino que es calco de un movimiento mundial, cuyo cenit, está en Europa, a cargo de un movimiento feminista neo-nazi, como son las  "Femmes", las cuales, al igual que los nazis predicaban la supremacía de la raza Aria, éstas señoras predican la supremacía del género femenino. Entonces, algunas señoras inspiradas en éstos movimientos, creación de los  departamentos de psicología social, de los servicios de inteligencia de algunos países de la  OTAN, han importado la moda feminista, como quien importa un vestido o una joya, para lucir bien en sociedad o para escalar en la misma y obtener un posesiona-miento

Las investigaciones que se le están haciendo a la señora Heredia de Humala, en su rol de Primera Dama, parece que traerán por los suelos, el mito de inmaculada, que proyectaba la señora, y que sus devotas amigas se habían encargado de crear un estado libre de cualquier cuestionamiento, so pena de alguna represión,  por el atrevimiento.

Entonces la pareja que detenta el poder, se ha comportado como una "Pareja de Aventureros", como tilda a los mismos César Hildebrant en su editorial del ultimo número de su semanario "Hildebrantensus13"  #253 y como no se, en que en artículo que escribí, me atreví a compararlos con otra pareja de aventureros, como fue "Bonnie and Clyde", por no compararlos con Benito Mussolini y Clara Petacci.

 Una consecuencia, de esta aventura política, es la supuesta destrucción de estos dos valores subyacentes, que constituyen la reserva moral del pueblo pueblo peruano, la del mito del "Inkari" y la imagen de valor de las mujeres luchadoras del Perú, como lo fueron María Parado de Bellido, heroína ayacuchana; Micaela Bastidas heroína y martir cuzqueña,  Antonia Moreno de Cáceres, esposa y fiel compañera de Andrés Avelino Cáceres, y cuantas más, mujeres valientes y honestas, que incluso han ofrendado sus vidas por su patria y pueblo. Que nada, pero nada tienen que ver con la señora Nadine Heredia de Humala o alguna de sus amigas feminista-arribistas.

Si es que el pueblo peruano, tiene la entereza suficiente sobrevivirá a estos duros golpes bajos, a su identidad nacional, basados en esos valores, que tenía como reserva moral, golpes propinados, por quienes decían ser sus "salvadores".Valores que quieren  rescatar al Imperio Inka, no por ser imperio, sino porqué si funcionó, le dio de comer a sus habitantes y creo alimentos que en su tiempo salvaron de la hambruna a la humanidad. Que quieren volver a ver  a florecer mujeres como María, Micaela y Antonia, mujeres de verdad, que parieron una patria. Que no pueden ser remplazadas por seudo-mujeres anoréxicas, oportunistas y mitómanas, que solo buscan el oro y la vanidad  .